sábado, 4 de junio de 2011

El ansiado deseo abstracto



Te conozco, sé cual es tu mayor admiración y tu menor preocupación. Eres una persona agradable y legal con aquellas personas que conoces, y tímido pero simpático con los desconocidos.
Cada día te despiertas orgulloso de tus amigos y de tu trabajo, aunque sabes que tienes mucho mas potencial que aportar del que se te considera.
La publicidad te ha creado una inseguridad sobre tu condición física, social o sexual, por lo que trabajas desesperadamente en la búsqueda de la ansiada perfección.
Esa perfección nunca llega, pasa el tiempo y tus sueños tampoco se cumplen. Te ves obligado a reprimir tus sentimientos con los excesos, ya sea el alcohol, el sexo o las drogas. Pero el placer es momentáneo y vuelves a tu rídicula rutina a la que llamas vida.
Te pasas la vida buscando una divina forma de vida abstracta, y un día despertarás, y te darás cuenta de que eres un niño iluso dentro del cuerpo de un viejo acabado.

Chaval, te diré una cosa, "eres un patético personaje tópico manipulado por una sociedad tópica que pretende acabar con la sabiduría del individuo emergente".

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